Impertinencias
Los reyes son los padres, susurraron
esperando la catástrofe. Qué sosiego
sentí oyendo confirmarse mis sospechas.
Me dio un poco de pena, aún conservaba
un resquicio de fe ciega a lo evidente.
Los reyes son los padres, admitámoslo.
Aristocracia trivial,
síndrome de abstinencia filosófica,
infancia moral, clan trascendente,
vasallaje del espíritu.
No hay consuelo.
Cae la fe y el hombre permanece,
la ciencia nos ignora, el mundo gira
sin nuestro permiso. Prometeos,
intrépidas Pandoras, atrapados
entre supersticiones ancestrales
y sofisticada nomenclatura.
Festín de cuervos. (y cuervos, amigo,
somos todos)
Creer no cambia el mundo, lo detiene
por una mentira que, muy en el fondo,
ya sabemos.
2 comentarios:
Me gustó.
Gracias.
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